La presidenta del Tribunal Constitucional (TC), Luz Pacheco, dialogó con Correo sobre la labor de la institución a lo largo del 2025 y sus sentencias más controversiales. Pacheco se pronunció sobre diversos temas, entre ellos el fallo que validó la Ley 32107, que prescribe los delitos de lesa humanidad ocurridos antes de julio del 2022.
Pacheco explicó que las demandas contra esta ley se declararon infundadas al no haberse alcanzado los cinco votos necesarios para desvirtuar su constitucionalidad. Según la presidenta del TC, la sentencia establece que los delitos de lesa humanidad son imprescriptibles, pero solo a partir del año 2002-2003, cuando el Perú asumió compromisos internacionales al respecto. Todo lo ocurrido antes se rige por plazos de prescripción del Código Procesal Constitucional, que van de 20 a 45 años.
"No estamos proponiendo la impunidad y tampoco la prescriptibilidad de los delitos de la humanidad. Eso es falso. Lo que la ponencia y la ley dicen es que son imprescriptibles, pero desde que el Estado peruano asumió un compromiso (internacional) que fue en el año 2002-2003", aclaró Pacheco.
La presidenta del TC también cuestionó la actuación del Ministerio Público en el caso de la expremier Betssy Chávez, quien fue excarcelada por decisión del TC tras permanecer algunos días recluida sin que se hubiese resuelto la ampliación de su prisión preventiva. Pacheco señaló que el responsable directo de que Chávez esté en la residencia de la embajada no es el TC, sino el Ministerio Público, que no solicitó ninguna restricción a su libertad.
Respecto a otras sentencias polémicas, Pacheco defendió la independencia del TC y su labor de respetar el Estado de Derecho. Sobre el fallo que permitió cambiar el apellido de una niña nacida por gestación subrogada, aclaró que no se aceptó la práctica, sino solo el cambio de apellido de la menor.
"Se ha dicho que el TC ha aceptado la maternidad subrogada y no es así. Esa es una sentencia sobre un matrimonio en el que ninguno de los dos podía tener hijos. Consigue un banco de semen y óvulos y, según dicen, la prima de la esposa aceptó tener gratuitamente el embarazo", explicó.
Pacheco también cuestionó la "judicialización" de todo en el país, donde las personas prefieren ir a los tribunales en lugar de llegar a acuerdos. Señaló que el TC, con solo siete magistrados y 210 personas, enfrenta una carga de más de 8 mil casos al año, lo que evidencia la necesidad de reformas.
"Somos una institución muy pequeñita comparado a todos otros (MP y PJ) con siete magistrados y máximo 210 personas. El año pasado teníamos siete mil casos, ahora hay mil más. En el mundo entero se está judicializando todo. Es una pena porque las personas no confían unas en las otras para llegar a un acuerdo y prefieren ir al juez", lamentó.
En ese sentido, Pacheco hizo un llamado a respetar el Estado de Derecho y los mecanismos jurídicos vigentes, evitando que "algunos estén tan convencidos de tener la razón que pasen por encima de todo". La presidenta del TC destacó la importancia de la independencia judicial y la necesidad de reformas para agilizar los procesos y recuperar la confianza ciudadana.











