El Ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo, cerró una "gran semana" con una serie de indicadores económicos positivos, incluyendo una baja en el riesgo país, la pobreza y la inflación mayorista. Además, el Gobierno se prepara para avanzar con la reforma laboral y tributaria, en un contexto de preocupación ciudadana por la corrupción y el sistema judicial.
Caputo destacó la baja en el riesgo país a 560 puntos básicos, la reducción de la pobreza al 27,5% y la inflación mayorista en 1,6% y 24,3% interanual. También celebró el superávit comercial de noviembre, cuatro veces superior a lo proyectado, y el superávit energético.
La baja adhesión a la convocatoria de la CGT es interpretada por el Gobierno como "un gran momento para acelerar" las reformas. Según una fuente cercana al presidente, "el mundo cambió y los argentinos no podemos caernos de allí. Estamos en la era de la consistencia".
En este contexto, el Gobierno se enfoca en la agenda política, con la reforma laboral y tributaria como prioridades. Caputo destacó que la reforma laboral incluirá un capítulo para la formalización del empleo y la baja impositiva, con la reducción del impuesto a las ganancias y las cargas sociales para nuevo empleo.
Asimismo, el Gobierno trabaja en un decreto que permita la entrada directa de productos desde países con organismos de control estrictos, buscando reducir la burocracia y fomentar la desregulación.
Si bien algunos sectores, como el de electrodomésticos y autos, muestran signos de recuperación, las pymes de rubros como moda y consumo enfrentan un panorama más complicado. Un abogado especializado en concursos y quiebras reveló que varios de sus clientes se preparan para solicitar concursos preventivos durante el verano.
El Gobierno enfrenta el desafío de lograr una transición exitosa hacia un modelo más productivo y eficiente, en un contexto de preocupación ciudadana por la corrupción y el sistema judicial.








