El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dejó abierta la posibilidad de una guerra con Venezuela, en una entrevista con la cadena NBC News, y se negó a responder si busca derrocar a su homólogo venezolano, Nicolás Maduro.
"No lo descarto, no", respondió Trump respecto a una eventual guerra con la república bolivariana, después de que en su primer discurso tras ganar las elecciones aseguró: "no voy a iniciar una guerra; voy a detener las guerras".
El magnate se negó a decir si derrocar a Maduro era su objetivo final. "Él sabe exactamente lo que quiero", respondió. "Él lo sabe mejor que nadie".
Las declaraciones de Trump se producen en medio de una creciente tensión entre Estados Unidos y Venezuela. El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, advirtió que "nada impedirá" a Estados Unidos aplicar el bloqueo contra petroleros en el Caribe, al tiempo que minimizó el apoyo de Rusia a la república bolivariana, tras asegurar que Moscú tiene "las manos llenas" con la guerra en Ucrania.
Rubio aseveró que "está claro que el statu quo actual con el régimen venezolano es intolerable para Estados Unidos", pero se negó a especular sobre si la Casa Blanca busca la caída de Maduro. Washington cree que "el régimen de Maduro es ilegítimo y que su cooperación con estos grupos terroristas en nuestra región, incluso sus propias actividades terroristas, son una amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos", declaró.
Además, Rubio aseguró que la Casa Blanca "no firmará ningún acuerdo de paz con bandas narcotraficantes". Ante el anuncio de Caracas de que su armada escoltará a los petroleros en el Caribe, el funcionario dijo que "no existe nada que vaya a impedir nuestra capacidad de aplicar las leyes de Estados Unidos en términos de buques que están sancionados".
Por otra parte, Rubio restó importancia al apoyo ruso a Caracas, luego de que Moscú advirtió que esperaba que Washington "no cometiera un error fatal" respecto a Venezuela y manifestó su preocupación por la amenaza estadounidense al transporte marítimo internacional. "No estamos preocupados por una escalada con Rusia respecto a Venezuela", declaró Rubio.
La última vez que hubo un bloqueo naval en el Caribe fue en octubre de 1962, durante la crisis de los misiles de Cuba, cuando Estados Unidos emplazó sus buques para impedir que la Unión Soviética transportara misiles a la isla. Esa crisis militar y diplomática se resolvió con negociaciones directas entre Washington y Moscú.
Mientras tanto, el Departamento del Tesoro estadounidense anunció la inclusión de siete personas vinculadas al presidente venezolano Nicolás Maduro y su esposa, Cilia Flores, en su lista de sancionados por "apoyar el narco-Estado rebelde de Nicolás Maduro".











