El candidato presidencial del Partido Integración Nacional (PIN), Luis Amador, ha realizado cuatro viajes al exterior desde que oficializó su aspiración a la presidencia el pasado 27 de setiembre. Esto ha generado críticas de uno de sus propios colaboradores, Ricardo Sossa, quien lo acusa de ser un "candidato ausente" mientras otros trabajan por la campaña.
Según el reporte de la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME), Amador salió del país dos días después de presentar su candidatura, el 29 de setiembre. Posteriormente, registró otras tres salidas: el 19 de octubre, el 11 de noviembre y el 3 de diciembre. En total, cuatro viajes al exterior en menos de tres meses.
Consultado por el medio El Observador, Amador justificó estos desplazamientos argumentando que se deben a "asuntos laborales" y que, a diferencia de otros candidatos, él debe "trabajar para ganarse la vida" y no cuenta con el "financiamiento de los millonarios".
Sin embargo, uno de los críticos de Amador dentro de su propia campaña es Ricardo Sossa, excomisionado de Inclusión Social y candidato a diputado por el PIN. En audios que circulan públicamente, Sossa utiliza un lenguaje sumamente ofensivo para referirse tanto al candidato presidencial como al presidente de la agrupación política, Wálter Muñoz.
En las grabaciones, Sossa califica a Amador y Muñoz como "hijueputas", "irresponsables", "cobardes" y "malparidos", acusándolos de haber salido del país pese a los "problemas internos" que, según él, enfrenta la campaña. Sossa incluso afirma que, de haber podido, habría renunciado a su candidatura.
Por su parte, Amador denunció que "personas vinculadas a su campaña han intentado boicotearla", lo que, en lugar de debilitarlos, los ha "unido más que nunca". Según el exministro de Obras Públicas y Transportes, estos hechos reflejan el "temor del oficialismo" ante la posibilidad de que los costarricenses conozcan sus propuestas y se convenzan de que él representa la mejor opción electoral.
La situación dentro de la campaña del PIN parece estar lejos de ser armónica, con acusaciones cruzadas y un candidato presidencial que, según sus propios colaboradores, pasa más tiempo fuera del país que trabajando por su aspiración política. Esto sin duda plantea interrogantes sobre el compromiso de Amador con su propia candidatura y la solidez de su proyecto.
