El primer ministro de Australia, Anthony Albanese, anunció este jueves 18 de diciembre de 2025 que su gobierno impulsará reformas legales para reforzar la lucha contra "quienes difunden el odio, la división y la radicalización", tras el atentado contra la comunidad judía del pasado domingo.
Albanese explicó que el fiscal general y el ministro del Interior comenzarán a trabajar en un paquete de medidas que incluirá la creación de un delito agravado de discurso de odio para predicadores y líderes que promuevan la violencia, así como el endurecimiento de las penas por expresiones de odio que inciten a actos violentos.
Entre las reformas previstas figura también la consideración del odio como factor agravante en la imposición de condenas por amenazas y acoso en línea, además del desarrollo de un sistema para incluir en listas oficiales a organizaciones cuyos dirigentes incurran en discursos de odio que promuevan la violencia o el odio racial.
El Gobierno contempla igualmente la tipificación de un delito federal específico y limitado de difamación grave basada en la raza o en la promoción de la supremacía racial. Asimismo, el ministro del Interior tendrá nuevas facultades para cancelar o rechazar visados a personas que difundan odio y división.
En paralelo, Albanese confirmó la creación de un grupo de trabajo de 12 meses para evaluar el sistema educativo australiano y asegurar que aborda de forma adecuada el antisemitismo.
Durante su comparecencia en el Parlamento, el primer ministro reiteró el "apoyo pleno" del Gobierno a las recomendaciones de la enviada especial contra el antisemitismo, Jillian Segal, cuyo informe fue presentado en julio.
Albanese calificó el antisemitismo como "un mal que desgarra el tejido de Australia" y señaló que se ha registrado un aumento de ataques contra la comunidad judía en el país. El Ejecutivo se comprometió a avanzar en la aplicación de las 13 recomendaciones del informe en consulta con la comunidad judía y con la enviada especial.
El domingo pasado, un tiroteo en la playa de Bondi contra un evento organizado por la comunidad judía dejó 16 muertos, incluyendo uno de los perpetradores, que eran padre e hijo. Según las investigaciones preliminares, las autoridades creen que padre e hijo actuaron de manera independiente y que estuvieron influidos por ideología vinculada al Estado Islámico (EI). En noviembre viajaron al sur de Filipinas, donde operan algunas células afines al EI.
Las reformas anunciadas por el Gobierno australiano buscan fortalecer la lucha contra el odio, la división y la radicalización, en respuesta al reciente atentado contra la comunidad judía. Con medidas como la creación de un delito agravado de discurso de odio, el endurecimiento de penas y la evaluación del sistema educativo, el país busca abordar de manera integral el creciente problema del antisemitismo y otros discursos de odio.










