Ante un proceso electoral marcado por la incertidumbre, irregularidades técnicas y denuncias de fraude, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, ha exigido al Consejo Nacional Electoral (CNE) que los resultados de los comicios se revisen voto por voto. Esta medida, según la mandataria, busca garantizar que se respete la voluntad ciudadana.
Miles de hondureños se manifestaron este miércoles en las calles de Tegucigalpa para defender el orden constitucional y la democracia, en una movilización convocada por el partido Libertad y Refundación (Libre) y un amplio espectro de organizaciones sociales.
En medio de la protesta, Castro advirtió que la democracia hondureña atraviesa "serias dificultades" ante los intentos de manipulación del proceso electoral. "Quieren manipular nuestra democracia y tomar decisiones que solo al pueblo le corresponden", expresó la presidenta.
La mandataria, cuyo gobierno concluye el próximo 27 de enero, solicitó "el respaldo consciente, firme y pacífico del pueblo hondureño" y aseguró contar con la lealtad de las Fuerzas Armadas para garantizar la estabilidad y la alternabilidad democrática.
Durante su discurso, Castro hizo un balance de su gestión, señalando que recibió un país "endeudado, empobrecido y excluido", y que su gobierno ha sentado las bases para la refundación del Estado y el desarrollo nacional.
Las elecciones generales del 30 de noviembre en Honduras se desarrollaron en un clima de alta tensión política, con denuncias de irregularidades técnicas, paralizaciones del escrutinio y acusaciones de injerencia extranjera por parte del expresidente estadounidense Donald Trump. Hasta el momento, no se ha determinado un vencedor.












