El presidente del Consejo Europeo, António Costa, advirtió este martes a Estados Unidos que no interfiera en los asuntos internos de Europa, afirmando que solo los ciudadanos europeos pueden decidir qué partidos deben gobernarlos. Sus declaraciones fueron una respuesta a la nueva estrategia de seguridad nacional del gobierno estadounidense, que describe a los aliados europeos como débiles y ofrece un apoyo tácito a partidos políticos de ultraderecha.
Costa señaló que "no podemos aceptar la amenaza de interferencia en la vida política europea. Estados Unidos no puede reemplazar a los ciudadanos europeos en la elección de cuáles son los partidos buenos o malos". Fabian Zuleeg, director ejecutivo del European Policy Centre, advirtió que los partidos nacionalistas en Europa se envalentonarán por el documento de estrategia estadounidense e "intensificarán los esfuerzos para desmantelar la UE desde dentro".
La estrategia de seguridad nacional de Estados Unidos, la primera desde que Donald Trump regresó al cargo, critica la política europea de libertad de expresión y migración, y plantea dudas sobre la fiabilidad a largo plazo de los aliados europeos como socios. Sin embargo, el portavoz del gobierno alemán, Sebastian Hille, rechazó estos "tonos parcialmente críticos contra la UE", afirmando que "las libertades políticas, incluido el derecho a la libertad de expresión, pertenecen a los valores fundamentales de la Unión Europea".
Rusia, por su parte, ha celebrado la nueva visión estratégica de Estados Unidos, que busca mejorar la relación con Moscú y poner fin a la guerra en Ucrania, lo que para el presidente del Consejo Europeo, António Costa, "no es una paz justa y duradera, sino solo sobre el fin de las hostilidades y la estabilidad de las relaciones con Rusia". Costa advirtió que "no podemos tener relaciones estables con Rusia cuando ese país sigue siendo una amenaza para nuestra seguridad".
