El mercado inmobiliario español enfrenta una situación de desequilibrio sin precedentes en dos décadas, con precios de las viviendas disparados y una demanda muy activa que contrasta con una oferta escasa. Según los últimos datos del Ministerio de Vivienda, el valor medio del metro cuadrado alcanzó los 2.153 euros en el tercer trimestre de 2025, superando por primera vez el pico de 2.101 euros registrado en 2008.
Solo en el último año, los precios medios de la vivienda se han disparado un 12,1%, la mayor subida interanual desde 2005. Desde 2022, el metro cuadrado se ha encarecido cerca de un 24%. En las grandes ciudades, como Madrid y Barcelona, los precios superan con creces la media nacional, llegando a 5.034 y 4.374 euros por metro cuadrado, respectivamente.
Este aumento desenfrenado de los precios se debe al desequilibrio entre una oferta de vivienda escasa y una demanda muy activa. Mientras que la población ha crecido en tres millones de habitantes desde 2019, la construcción de nuevas viviendas ha satisfecho apenas la mitad de esa demanda cada año. El sector de la construcción aún arrastra los efectos de la crisis, pasando de finalizar más de medio millón de pisos al año entre 2004 y 2008 a apenas 50.000 entre 2013 y 2017.
Ante este escenario, expertos como Raymond Torres, director de Coyuntura de Funcas, advierten que España podría estar enfrentando una nueva burbuja inmobiliaria, aunque "no como la de 2008", ya que no se trata de una burbuja de crédito, sino de "una burbuja de expectativas". Los inversores anticipan que los precios seguirán subiendo, lo que motiva la compra, a pesar de que el precio ya no esté al alcance de la mayoría de la clase media.
Las consecuencias de esta situación son evidentes: la cuota media mensual de una hipoteca ronda los 786,2 euros, lo que supone más de un tercio del salario medio, y el precio de una vivienda equivale a 7,7 años de sueldo íntegro, según el Banco de España. Para quienes viven de alquiler, la situación tampoco es más halag eña, con precios medios de 1.824 euros mensuales en Madrid y 1.920 euros en Barcelona.
Ante este panorama, existe consenso en que la solución pasa por aumentar la oferta de vivienda, ya sea construyendo más o movilizando casas vacías y recuperando pisos destinados a alquiler turístico y de temporada. Las administraciones y partidos políticos han presentado diversas propuestas, como el nuevo Plan Estatal de Vivienda y la creación de la empresa estatal Casa 47. Sin embargo, 2026 dirá si estas medidas logran frenar el aumento descontrolado de los precios y hacer más accesible el acceso a la vivienda en España.










