A pocos días de iniciar el 2026, las personas ya empiezan a trazar sus metas y propósitos para el venidero año nuevo. Entre las más destacadas y comunes está ahorrar, por lo que muchos deciden en qué reducir e invertir un poco más sus recursos.
Entre las opciones en los métodos de ahorro está el reducir el consumo en los servicios públicos, especialmente la energía, pues en algunas zonas el costo del kilovatio es muy costoso. Y es allí donde también es importante tener claro que electrodomésticos de uso diario consumen más energía.
Entre los elementos de cocina más usados están el horno eléctrico y la freidora de aire, pero ¿cuánta energía pueden consumir en una sola preparación? Según Greenmatch, una freidora de aire utiliza entre 1,4 y 1,7 kWh por uso, mientras que un horno tradicional consume entre 2,0 y 2,2 kWh.
Con referencia a la potencia, la freidora de aire estándar funciona entre 800 y 2.000 W, por su parte el horno eléctrico puede alcanzar más del doble, entre 2.000 a 5.000 W. De esta manera, la freidora de aire sería más eficiente si entre sus propósitos está el reducir los gastos en servicios públicos.
La optimización de la freidora de aire es gracias a su sistema de circulación rápida de aire caliente, lo que permite cocinar los alimentos de manera uniforme y en menos tiempo. Además, al tener una cámara de cocción más pequeña, requiere menos energía para alcanzar y mantener la temperatura adecuada.
La freidora de aire o Air Fryer ha ganado popularidad en los últimos años es por su capacidad para preparar una amplia gama de alimentos con una textura crujiente, sin la necesidad de utilizar aceite. Esto ayudará a no consumir alimentos con alto contenido de grasas saturadas que pueden elevar el colesterol LDL, aumentando así el riesgo de enfermedades cardíacas o accidentes cerebrovasculares.
Sin embargo, no todos los alimentos son aptos para la freidora de aire. Alimentos como sopas, cremas, caldos, pasta o arroz no son recomendables debido a que podrían dañar componentes críticos del electrodoméstico y provocar un cortocircuito. Tampoco se recomienda el uso de papel aluminio, ya que puede obstruir la circulación del aire.
En conclusión, la freidora de aire se perfila como la opción más eficiente y económica en el consumo de energía en comparación con el horno eléctrico. Su sistema de circulación de aire caliente y su cámara de cocción más pequeña le permiten ahorrar hasta un 30% en la factura de la luz. Sin duda, una alternativa a considerar para quienes buscan reducir sus gastos en servicios públicos durante el próximo año.










