El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha respondido a las duras críticas de la oposición sobre su propuesta de convocar una Asamblea Constituyente, afirmando que no tiene intenciones de convertirse en un "dictador" y que la iniciativa busca materializar reformas que el Congreso ha bloqueado durante décadas.
La solicitud formal para convocar la Asamblea Constituyente fue presentada por un grupo de líderes sociales, entre los que se encuentra el exministro de la Igualdad, Carlos Rosero. Este mecanismo, establecido en el artículo 376 de la Constitución, requiere la recolección de aproximadamente 3 millones de firmas (equivalente al 5% del censo electoral) para que la propuesta sea discutida y aprobada por el Congreso.
La reacción de la oposición no se hizo esperar. Figuras como el exministro de Educación y actual precandidato presidencial, Alejandro Gaviria, lanzaron duras críticas, afirmando que la Asamblea Constituyente no tiene como propósito el cambio social, sino una "estrategia política para quedarse en el poder". Gaviria también sugirió que el oficialismo buscaría financiación para campañas electorales y una "ventana" para que Petro y sus ministros hicieran política de manera indirecta.
En respuesta a estas acusaciones, el presidente Petro publicó un mensaje en la red social X, vinculándolo a un video de la coalición precandidata 'La Gran Consulta por Colombia', en el que figuras como Vicky Dávila y Juan Daniel Oviedo expresaron su defensa de la Constitución actual. Petro escribió: "No voy a ser dictador. No insulte, ni la constituyente se hará en mi gobierno".
Además, el mandatario realizó una grave acusación contra Juan Daniel Oviedo, exdirector del DANE durante el gobierno de Iván Duque, afirmando que fue funcionario de un gobierno "donde fueron desaparecidos miles de jóvenes asesinados y encarcelados", en referencia al estallido social de 2021.
Más allá de este cruce personal, Petro fundamentó la necesidad de la iniciativa de Asamblea Constituyente en un extenso mensaje, argumentando que es la vía para materializar reformas que, según él, el Congreso ha bloqueado por más de tres décadas.
Con este intercambio, la propuesta de Asamblea Constituyente se instala como uno de los temas de mayor polarización en el actual panorama político colombiano, marcando la pauta de lo que será un intenso debate nacional en los próximos meses, mientras el comité ciudadano inicia el monumental reto de recolectar las firmas necesarias para llevar la propuesta al Legislativo.












