Las fiestas decembrinas suelen traer consigo un aumento preocupante en los casos de lesiones por quemaduras en México, llegando a incrementarse hasta un 40% durante esta temporada, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud.
La principal causa de estos accidentes es el mal manejo de la pirotecnia, que según el Secretariado Técnico del Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes (STCONAPRA), acumula el 73% de los casos registrados. La titular de la dependencia, Estrella Albarrán, señaló que el 82% de estas quemaduras se producen en las manos, seguidas de daños en rostro y ojos, incluso en menores de un año. Advirtió que los accidentes provocados por el uso irresponsable de cohetes o petardos pueden tener consecuencias terribles, como la pérdida de extremidades.
La segunda causa más común de quemaduras en estas fechas son las fogatas, anafres, velas, estufas y el manejo de líquidos calientes. La fundación Michou y Mau afirma que esta es la principal causa de la mayoría de las quemaduras en menores de edad: "los niños jalan los manteles de la mesa de Navidad y se echan encima las ollas ( ), el 60 por ciento de las quemaduras es por líquidos hirvientes".
Además, hay que sumar las quemaduras provocadas por la sobrecarga de extensiones, el uso de luces decorativas defectuosas o la manipulación de instalaciones de alto voltaje sin el equipo adecuado. STCONAPRA advierte que este tipo de lesiones son especialmente peligrosas, pues, a diferencia de las quemaduras por fuego directo, la corriente eléctrica puede no dejar marcas superficiales visibles al atravesar el cuerpo.
La fundación también alertó sobre la ingesta accidental de líquidos corrosivos, los cuales pueden generar quemaduras internas. Además, señaló algunas causas de incendios en estas fechas, como explosiones de tanques de gas, cortocircuitos o incluso accidentes automovilísticos donde empieza el fuego.
Afortunadamente, la Secretaría de Salud señala que la mayoría de estos accidentes son prevenibles. Entre las recomendaciones emitidas por la dependencia se encuentran colocar el árbol de Navidad y las luces decorativas lejos de fuentes de calor, además de revisar que estas últimas se encuentren en buen estado y desechar aquellas que tengan cables pelados o dañados. Asimismo, llamó a evitar la sobrecarga de contactos y circuitos eléctricos.
La dependencia también exhortó a madres, padres y personas cuidadoras a no perder de vista a los menores de edad, especialmente niños y niñas de entre dos y cinco años, pues su curiosidad los hace más vulnerables a quemaduras. Señaló que se debe evitar que los pequeños manipulen pirotecnia y mantener veladoras y encendedores lejos de materiales inflamables, así como a usar protectores en estufas y recipientes calientes.
Por su parte, el pediatra Luis Alfredo Reynoso Valverde detalló el procedimiento a seguir en caso de quemaduras: retirar a la persona de la fuente de calor y irrigar la herida con agua corriente durante 20 minutos y cubrirla con una gasa, sin ejercer presión. Dijo que hay que evitar aplicar hielo o remedios caseros como aceite, pasta o shampoo. En caso de una quemadura profunda o que afecte al rostro, las extremidades, los genitales o una zona extensa del cuerpo, se debe acudir inmediatamente a urgencias.










