La reciente liberación de 30 mil páginas de archivos vinculados con Jeffrey Epstein ha generado un impacto político, luego de que entre los documentos se encontrara una carta atribuida al propio financista y dirigida a Larry Nassar, así como correos electrónicos que detallan vuelos realizados por el expresidente Donald Trump en el jet privado de Epstein.
Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos, la carta que contiene referencias explícitas y alusiones indirectas a Trump es en realidad un documento apócrifo, cuya caligrafía no coincide con otros escritos de Epstein. Además, el sobre presenta un matasellos fechado tres días después de su muerte y fue enviado desde una región distinta a su lugar de reclusión.
En cuanto a los correos electrónicos, estos revelan que los registros muestran al menos ocho trayectos entre 1993 y 1996 en los que figuraba Trump, y en cuatro de ellos también aparecía Ghislaine Maxwell, condenada a 20 años de prisión por colaborar con Epstein en el abuso de menores.
Uno de los vuelos consignados indica que los únicos pasajeros eran Epstein y Trump, mientras que en otro trayecto viajaban ambos junto con una mujer de 20 años cuyo nombre fue censurado. Otros desplazamientos incluyeron a mujeres que posteriormente podrían ser consideradas testigos en el caso Maxwell.
Sin embargo, el Departamento de Justicia aclaró que estos datos no implican acusación penal alguna contra el expresidente. Asimismo, entre los archivos difundidos también apareció un testimonio recabado por el FBI en octubre de 2020, en el que un exconductor de limusinas relató una conversación telefónica que escuchó mientras trasladaba a Trump en 1995, en la que una mujer conocida por él aseguró haber sido violada por el republicano y el delincuente sexual. La identidad de la supuesta víctima no fue revelada y múltiples detalles permanecen censurados.
El Departamento de Justicia calificó este testimonio como parte de afirmaciones "infundadas y sensacionalistas" presentadas antes de las elecciones de 2020, y sostuvo que tales señalamientos carecen de fundamento y credibilidad.
La filtración de estos archivos vinculados con Epstein ha generado un nuevo escándalo político, con implicaciones potenciales para figuras públicas de alto perfil. A medida que se continúe analizando el contenido de estos documentos, es probable que surjan más revelaciones que mantengan la atención en este caso.
