La ciudad de La Paz, Bolivia, ha sido escenario de nuevos enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas de seguridad. Este viernes, la Central Obrera Boliviana (COB) y los maestros se congregaron en las inmediaciones de la plaza Murillo, generando un tenso escenario en el centro de la capital.
Los manifestantes lanzaron petardos y objetos contra la Policía, que respondió con el uso de gases lacrimógenos para dispersar a la multitud. Algunos de los movilizados incluso intentaron derribar las barandas de seguridad para ingresar a la plaza Murillo, pero no lo lograron.
Estos incidentes se producen en el marco del segundo día de protestas en La Paz. El jueves, una marcha de mineros cooperativistas, la COB y otros sectores se llevó a cabo en rechazo al Decreto Supremo 5503, especialmente a la disposición sobre la eliminación de la subvención.
La tensión en las calles paceñas se mantiene, con la Policía intentando contener a los manifestantes que exigen la derogación de la medida gubernamental. Hasta el momento, no se han reportado heridos de gravedad, pero la situación sigue siendo volátil en el centro de la ciudad.
Este nuevo episodio de confrontación entre la ciudadanía y las fuerzas del orden refleja la complejidad del panorama político y social que atraviesa Bolivia en estos momentos. Las autoridades deberán buscar una salida dialogada que permita atender las demandas de los sectores movilizados sin recurrir a la violencia.
