Expertos informáticos han denunciado una enorme filtración de datos personales de ciudadanos argentinos, que se perfila como el mayor hackeo de la historia del país. La información, que habría sido robada de organismos como ANSES, ARCA, Propiedad Automotor y empresas de telefonía celular, habría sido puesta a la venta en la dark web por una compañía llamada Work Management, antes conocida como SudamericaData.
Según los informes, la filtración incluye datos sensibles como salarios, números de teléfono, direcciones y vehículos registrados, que ahora están en manos de cibercriminales. Esto expone a millones de argentinos a potenciales abusos y delitos, como fraudes y robos de identidad.
El experto en ciberseguridad Javier Smaldone fue uno de los primeros en dar a conocer la filtración, explicando que la información habría sido obtenida de manera ilegal por la empresa Work Management, que supuestamente trabajaba "para fuerzas policiales". Smaldone afirma que ha denunciado esta práctica durante años, señalando que la compañía fue fundada por un exfuncionario de la AFIP que fue despedido por acceder indebidamente a bases de datos.
Por su parte, el Gobierno ha asegurado que no se vulneró la seguridad de ningún sitio oficial y que toda la información guardada está protegida. Sin embargo, los expertos advierten que la magnitud de la filtración, que involucra a más de 400 millones de registros, es sumamente preocupante y pone en riesgo la privacidad y seguridad de millones de argentinos.
Esta situación evidencia la necesidad urgente de fortalecer las medidas de ciberseguridad y protección de datos en el país, así como de investigar a fondo las prácticas de empresas que puedan estar lucrando con información confidencial de los ciudadanos. La filtración de datos personales a gran escala es un delito grave que debe ser perseguido y sancionado con todo el rigor de la ley.











