La princesa heredera de Noruega, Mette-Marit, enfrenta un deterioro significativo de su salud debido a su enfermedad pulmonar crónica. Los médicos que la atienden han comenzado a prepararla para un posible trasplante de pulmón, según informó este viernes la Casa Real Noruega.
Mette-Marit, de 52 años, fue diagnosticada con fibrosis pulmonar crónica en 2018. En los últimos años, su condición le ha obligado a cancelar varias actividades de la agenda de la Casa Real. Ahora, su estado de salud ha empeorado rápidamente en este último otoño, llevando a los médicos a considerar el trasplante como una opción necesaria.
"Estamos llegando al punto en el que será necesario un trasplante de pulmón, y estamos llevando a cabo los preparativos necesarios para garantizar que esto sea posible cuando llegue el momento", declaró Are Martin Holm, jefe del Departamento de Medicina Respiratoria del Hospital Universitario Rikshospitalet de Oslo.
Sin embargo, Holm aclaró que la princesa heredera no tendrá prioridad sobre el resto de pacientes en la lista de espera. "Cuando llega un órgano, tiene un tamaño y un tipo de sangre específicos. Según eso, tenemos que ver qué paciente de la lista es el más adecuado. De los que coinciden, siempre elegimos al más enfermo, al que lo pasa peor y al que tiene menos capacidad de espera", explicó.
Actualmente, hay entre 20 y 40 pacientes en lista de espera para un trasplante de pulmón en Noruega. Holm señaló que aún es demasiado pronto para incluir a Mette-Marit en dicha lista, ya que su situación aún no es lo suficientemente grave. No obstante, los médicos ya están preparándola para el eventual procedimiento.
"Siempre tuve la esperanza de que pudiéramos controlar la enfermedad con medicamentos y hasta ahora la evolución había sido bastante lenta. Sin embargo, últimamente ha sido más rápida de lo que tanto yo como los médicos esperábamos", declaró la princesa a la televisión noruega NRK.
La Casa Real Noruega informó que el programa oficial de Mette-Marit se organizará de manera que sus actividades se adapten en la medida de lo posible a su estado de salud. La princesa heredera ha manifestado "un gran interés" en seguir desempeñando sus funciones a pesar de su delicada situación.











