El Ejército de Estados Unidos ha anunciado la muerte de cuatro hombres a bordo de una embarcación que fue bombardeada mientras navegaba en aguas del Pacífico oriental. Este ataque se enmarca en la operación "Lanza del Sur", una iniciativa del Pentágono supuestamente dirigida contra el narcotráfico, que ya se ha cobrado la vida de casi un centenar de personas.
Según el Mando Sur del Ejército (Southcom), los cuatro fallecidos fueron identificados como "narcoterroristas" y el objetivo del ataque era "operado por una organización terrorista designada". Las Fuerzas Armadas aseguraron que el bombardeo, ordenado por el secretario de Defensa, Pete Hegseth, tuvo lugar en "aguas internacionales" y que la embarcación "transitaba por una ruta conocida de narcotráfico en el Pacífico Oriental y participaba en operaciones de narcotráfico".
Este nuevo incidente se produce en medio de una escalada de tensiones por los ataques contra supuestas narcolanchas en el Pacífico y en el Caribe, en los que han muerto 99 personas de acuerdo al último recuento de víctimas. El anuncio de la muerte de estos cuatro hombres llega poco antes de que el presidente Donald Trump se dirija a la nación.
La operación "Lanza del Sur" ha sido objeto de críticas y controversia debido a la falta de transparencia y a las preocupaciones sobre el uso excesivo de la fuerza por parte de las fuerzas estadounidenses. Organizaciones de derechos humanos han denunciado que estas acciones militares han provocado la muerte de civiles y han cuestionado la legitimidad de los ataques.
Expertos en seguridad internacional señalan que la lucha contra el narcotráfico es un desafío complejo que requiere una estrategia integral que incluya medidas de prevención, tratamiento y reducción de la demanda, además de la cooperación internacional. Cuestionan si el enfoque militarista de la "Lanza del Sur" es la mejor manera de abordar este problema.
La noticia de la muerte de estos cuatro hombres en el Pacífico oriental volverá a encender el debate sobre los límites y la efectividad de las operaciones antinarcóticos lideradas por Estados Unidos en la región. Será importante seguir de cerca las investigaciones y las reacciones de la comunidad internacional ante este nuevo incidente.









