Rosario será escenario este jueves de una intensa jornada de protesta y movilización sindical en rechazo al proyecto de reforma laboral impulsado por el Gobierno nacional. La principal concentración está prevista para las 16 en la Plaza 25 de Mayo, donde confluirán las columnas que desde la mañana recorrerán distintos puntos de la ciudad.
La actividad en Rosario comenzará desde temprano con distintas columnas. Sindicatos agrupados en la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) y la Corriente Clasista y Combativa (CCC) partirán desde la iglesia de San Cayetano hacia Plaza 25 de Mayo. Además, la CTA Autónoma de Rosario convocó a concentrar a las 10:30 en Avenida Pellegrini y Buenos Aires para marchar al centro y sumarse a las actividades.
En conferencia de prensa, dirigentes de la CGT Rosario señalaron que la movilización responde al "rechazo al proyecto de reforma laboral y la defensa de los derechos de los trabajadores", y destacaron la necesidad de que legisladores nacionales escuchen el reclamo de los trabajadores, sin empleo formal y con creciente precarización laboral.
La protesta en Rosario se enmarca en una jornada nacional de lucha que incluye movilizaciones simultáneas en otras ciudades y una marcha central de la CGT hacia Plaza de Mayo en Buenos Aires, a la que se sumarán las dos CTA y movimientos sociales.
Además de las columnas sindicales, gremios del sector universitario confirmaron un paro de 24 horas sin asistencia a los lugares de trabajo, en rechazo tanto a la reforma laboral como a otras políticas de ajuste que impactan en el financiamiento educativo.
Un aspecto distintivo de la jornada en Rosario fue el acompañamiento expresado por parte de sectores de la Iglesia Católica local, que recibieron a dirigentes sindicales y emitieron pronunciamientos en defensa de los derechos de los trabajadores.
En el plano político, referentes sindicales y sociales definieron la protesta como una señal de alerta frente a las modificaciones planteadas en el proyecto, que consideran un retroceso en derechos laborales, y criticaron que el texto "no presenta mejoras sustanciales para los trabajadores".
