Argentinos por la Educación, una organización dedicada a impulsar mejoras en el sistema educativo argentino, presentó recientemente la "Hoja de ruta para la alfabetización", un documento que reúne evidencia nacional e internacional, entrevistas con expertos y la experiencia de trabajo conjunto con más de 15 jurisdicciones del país, con el objetivo de fortalecer la planificación e implementación de políticas de alfabetización a nivel provincial.
El desafío es urgente: en las pruebas nacionales Aprender Alfabetización 2024, 3 de cada 10 estudiantes de 3 grado se consideran rezagados en su desempeño lector y menos de la mitad de los alumnos el 45% alcanza el nivel esperado de lectura. Esto pone de manifiesto la necesidad de acciones concretas para mejorar los índices de alfabetización en el país.
La hoja de ruta organiza los componentes centrales de una política de alfabetización en seis dimensiones: 1) los cimientos, 2) planificación estratégica, 3) preparación del sistema, 4) puesta en marcha, 5) evaluación y difusión, y 6) institucionalización y sostenibilidad. Cada una de estas dimensiones aborda los desafíos y las tareas necesarias para implementar de manera efectiva una política de alfabetización a nivel provincial.
"La hoja de ruta sintetiza evidencia y experiencia. Su elaboración implicó un arduo proceso de revisión de literatura, diálogos con quienes impulsan los planes de alfabetización en las provincias y consultas con expertos de otros países. Aspiramos a que sea un insumo valioso: tanto para poner en relieve las numerosas acciones que ya están en marcha, como para orientar una implementación cada vez más robusta y, por lo tanto, más efectiva ", afirma Federico del Carpio, coordinador de Políticas Educativas de Argentinos por la Educación y autor del documento.
Además del análisis por dimensiones, la hoja de ruta incorpora un listado de seguimiento que organiza las acciones clave para que cada jurisdicción sostenga la política de alfabetización, incluyendo planificación presupuestaria, distribución de materiales, comunicación de resultados, formación docente, evaluaciones y revisión del plan.
"Alfabetizar hoy implica enfrentar enormes desafíos que antes no existían: la inmediatez de las pantallas, la fragmentación de la atención y contextos familiares donde la palabra circula menos, el ambiente alfabetizador es frágil y ni hablar si hay dificultades en torno a lo económico", sostiene Marina Bertone, docente de nivel primario.
Liliana Fonseca, Magister en Psicología Cognitiva y Aprendizaje, afirma que si bien la guía reúne evidencia científica actual, no resuelve los distintos posicionamientos teóricos de los docentes, directivos y funcionarios a cargo de las políticas públicas, involucrados en la alfabetización. Sin embargo, reconoce que "un proceso está germinando" y que "muchos niños, cerca del final del año escolar, hablaban de las 'evaluaciones del gobierno' y empezaron a sentir que era importante evaluar y evaluarse a sí mismos".
La presentación de esta hoja de ruta se enmarca en el Compromiso Federal por la Alfabetización, lanzado en mayo de 2024 por el Consejo Federal de Educación, y busca ser un insumo valioso para que las provincias puedan fortalecer sus políticas de alfabetización y garantizar que cada niño y niña de Argentina aprenda a leer y escribir a la edad adecuada.












