Una jornada de celebración en la playa Bondi de Sídney se transformó en una tragedia cuando dos atacantes armados abrieron fuego indiscriminadamente contra la multitud, dejando al menos 12 personas muertas y alrededor de 30 heridas.
El hecho ocurrió el domingo cerca de las 18:45 hora local, cuando se estaba llevando a cabo una celebración del pueblo judío conocida como Janucá. Según los informes, los dos sujetos llegaron al lugar armados y con explosivos, dispuestos a cometer un atentado.
Tan pronto comenzaron los disparos, la Policía que custodiaba el evento entró en acción y logró abatir a uno de los atacantes. Sin embargo, el otro continuó disparando hasta que un civil que se había refugiado entre dos vehículos logró sorprenderlo, abalanzarse sobre él y quitarle el rifle.
Aunque el civil evitó una tragedia aún mayor, el segundo atacante logró huir, pero fue herido de bala y se encuentra en estado crítico. Además, las autoridades encontraron explosivos en un vehículo, los cuales fueron desactivados.
Las investigaciones continúan para determinar la identidad de los atacantes, sus motivos y posibles cómplices. Mientras tanto, la comunidad de Sídney se encuentra conmocionada por este terrible acto de violencia que interrumpió una celebración pacífica.
Las autoridades han desplegado un amplio operativo de seguridad en la zona y han convocado a la población a mantenerse alerta. Por su parte, el gobierno australiano ha condenado enérgicamente este ataque y ha prometido que no descansará hasta dar con los responsables.
Este trágico incidente ha generado consternación a nivel internacional y ha puesto de manifiesto la necesidad de redoblar los esfuerzos para combatir el terrorismo y garantizar la seguridad de la ciudadanía en todo momento.
