El dirigente campesino del Valle Alto de Cochabamba, Nelson Virreira, anunció este martes que su sector participará de las medidas de protesta encabezadas por la Central Obrera Boliviana (COB) en contra del Decreto Supremo 5503. Pese a las movilizaciones de los cocaleros de las seis federaciones, Virreira aseveró que no descuidarán la seguridad del exmandatario Evo Morales en la región del trópico.
"Como movimiento campesino estamos sumándonos desde el lunes de manera activa a todas las movilizaciones convocadas por la Central Obrera Boliviana; por tanto, el pueblo está movilizado y para tapar toda esa movilización, todo este descontento que el pueblo está generando contra este gobierno dictador, hacen este tipo de aprehensiones que solamente son cortinas de humo y show para tapar este descontento del pueblo boliviano", sostuvo Virreira.
Sobre la seguridad de Evo Morales, el dirigente campesino aseguró que el exmandatario está protegido "no por la policía, no por seguridad especial, sino por los compañeros de base de las centrales de las organizaciones del trópico de Cochabamba". Por lo tanto, Virreira afirmó que ese resguardo a la seguridad física personal del expresidente "se va a mantener".
Las declaraciones de Virreira se dan en medio de las crecientes protestas en Bolivia contra el Decreto Supremo 5503, impulsado por el Gobierno del presidente Luis Arce. Dicho decreto establece nuevas regulaciones para la comercialización de la hoja de coca, lo que ha generado el rechazo de los cultivadores.
La Central Obrera Boliviana (COB), principal central sindical del país, ha convocado a una serie de movilizaciones y paros para exigir la derogación del decreto. Ahora, con la incorporación de los campesinos del Valle Alto de Cochabamba, el paro y las protestas se fortalecen aún más.
La participación de los campesinos es clave, ya que el Valle Alto es una región tradicionalmente vinculada a la producción de coca y al movimiento cocalero liderado por Evo Morales. La decisión de Virreira de sumarse a las protestas de la COB demuestra la amplitud del rechazo social al Decreto Supremo 5503 y la determinación de los sectores populares por defender sus intereses.
Además, el compromiso de los campesinos por mantener la seguridad de Evo Morales refleja la lealtad y el apoyo que el exmandatario sigue recibiendo de sus bases, incluso después de haber dejado el poder. Esta situación representa un desafío adicional para el Gobierno de Arce, que deberá lidiar con la movilización de múltiples sectores sociales en su contra.
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