Honduras atraviesa una situación electoral compleja a días del plazo final para que el Consejo Nacional Electoral (CNE) presente los resultados generales de las elecciones del 30 de noviembre. El escrutinio especial de cientos de actas con inconsistencias, principalmente a nivel de alcaldías y diputados, se realiza contra reloj, mientras crece la incertidumbre y las tensiones políticas.
Hasta el momento, el CNE solo ha dado a conocer los resultados a nivel presidencial, declarando como ganador al candidato del Partido Nacional, Nasry Asfura, quien cuenta con el apoyo del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Sin embargo, el escrutinio de los otros niveles electorales se ha visto retrasado por diversos problemas técnicos, administrativos y conflictos internos en el ente electoral.
La demora en los resultados ha generado una gran incertidumbre, especialmente en algunas alcaldías donde las diferencias de votos entre los principales candidatos son muy estrechas. Tal es el caso de la capital, Tegucigalpa, donde el candidato del Partido Nacional, Juan Diego Zelaya, tendría una ventaja de apenas 600 votos sobre el alcalde saliente, Jorge Aldana, del Partido Libre.
Ante esta situación, el coordinador general del Partido Libre, el expresidente Manuel Zelaya, convocó a una movilización pacífica de la militancia de su partido el próximo lunes 29 de diciembre hacia el Instituto Nacional de Formación Profesional (Infop), donde se resguarda todo el material electoral. Zelaya calificó a estas elecciones como "las más fraudulentas, manipuladas e infladas de nuestra historia reciente" y aseguró que quienes hayan delinquido deberán responder ante la justicia.
Por su parte, la consejera presidenta del CNE, Ana Paola Hall, aseguró que, pese a los obstáculos, habrá resultados en tiempo y forma, como lo establece la Constitución y el ente electoral. Sin embargo, la incertidumbre y las tensiones políticas siguen creciendo a medida que se acerca el plazo final para la presentación de los resultados generales.












