El Partido Comunista (PC) ha declarado que recurrirá a la movilización de las masas para atacar el gobierno del presidente electo José Antonio Kast, lo que incluye, según expertos, ataques a la institucionalidad y probablemente violencia en general.
Esta no es la primera vez que el PC utiliza este tipo de estrategia. De acuerdo al análisis de un profesor universitario, el mismo accionar fue observado cuando el partido buscaba negar "la sal y el agua" al gobierno de Eduardo Frei Montalva en los años 60. Esto, señala el académico, es "consecuente con la concepción marxista-leninista de violencia instrumental y de la democracia como una mera vía para alcanzar el poder total".
La declaración del PC se produce en un momento de alta tensión política en Chile, luego de la sorpresiva victoria de Kast en la primera vuelta presidencial. El líder de extrema derecha se enfrentará en la segunda vuelta a Gabriel Boric, el candidato de la izquierda.
Analistas temen que las anunciadas movilizaciones del PC puedan derivar en episodios de violencia, tal como ocurrió durante las protestas sociales de 2019 contra el gobierno de Sebastián Piñera. En aquella oportunidad, el partido jugó un rol protagónico en los disturbios que sacudieron al país.
Si bien el PC tiene una representación minoritaria en el Congreso, su capacidad de convocar a las calles lo convierte en un actor clave en el escenario político actual. Expertos advierten que sus acciones podrían profundizar aún más la polarización y la inestabilidad en Chile.












