El exvicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, compareció este sábado ante una audiencia judicial para reclamar su traslado a un hospital debido a su delicado estado de salud, agravado por las condiciones de su encarcelamiento.
Glas, considerado uno de los símbolos de la persecución judicial o "lawfare" en Ecuador, afirmó que su traslado a la actual prisión, aún en construcción, obedeció a un "show mediático-político" con tratos degradantes que han empeorado su salud.
Según informó su abogado Fausto Lara, Glas ha recibido 527 atenciones médicas desde abril de 2024, cuando estaba recluido en la cárcel La Roca, hasta la fecha, de las cuales 40 se produjeron en el penal donde está actualmente.
Sin embargo, el médico privado Edison Barreto, quien examinó al exvicegoberante el 19 de diciembre pasado, indicó que a sus 56 años Glas padece 18 enfermedades, entre ellas espondilitis anquilosante juvenil, hipertensión, colitis, gastritis, estreñimiento crónico, trastorno generalizado de ansiedad y depresión grave y profunda.
Barreto, que forma parte del comité de especialistas ordenado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para vigilar la salud de Glas, advirtió sobre un riesgo suicida permanente y dijo que sus órganos reflejan un envejecimiento biológico acelerado.
Además, el médico cuestionó que la mayoría de evaluaciones se han realizado por médicos generales, no especialistas, y que el espacio destinado para atención médica dentro del penal es inadecuado, con polvo de cemento que agrava condiciones como rinitis alérgica, asma y sinusitis crónica.
"De nada vale tener 500 atenciones si el paciente, en lugar de mejorar, empeora", dijo Barreto.
Por su parte, los representantes estatales señalaron que no es necesario trasladar al paciente a un hospital y aseguraron haber cumplido con todo lo concerniente con el área médica.
El juez Jean Daniel Valverde dará a conocer su fallo este domingo 28 de diciembre a las 16:00 (hora local) sobre la solicitud de habeas corpus presentada por los abogados de Glas.
