El Gobierno peruano ha elaborado un Decreto de Urgencia que permitiría la reorganización patrimonial de la estatal Petroperú, con el objetivo de garantizar su sostenibilidad financiera y evitar su quiebra.
Según la información a la que tuvo acceso este medio, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) ha preparado un borrador de decreto que facultaría a la agencia estatal ProInversión a diseñar y ejecutar el proceso de escisión de los activos estratégicos y no estratégicos de Petroperú.
El plan implicaría la creación de "uno o más bloques patrimoniales o fideicomisos" que podrían incluir incluso a la nueva refinería de Talara, con el fin de "garantizar la sostenibilidad" de la empresa estatal. Los flujos y recursos generados por estos bloques se destinarían prioritariamente al pago de pasivos operativos críticos y obligaciones financieras de Petroperú.
La medida se produce luego de que el anterior presidente del directorio, Luis Canales, fuera removido el pasado 22 de diciembre. Su sustituta, la ingeniera Elba Rojas Álvarez, sería la carta elegida por el MEF para llevar adelante este nuevo plan.
El borrador del Decreto de Urgencia también ordena al nuevo directorio de Petroperú que apruebe una nueva estructura orgánica e implemente medidas de reconversión y reducción de personal en un plazo máximo de 20 días hábiles.
Esta inminente publicación del decreto ha generado gran inquietud entre los trabajadores de la petrolera estatal. El Sindicato de Trabajadores Administrativos de Petroperú (STAPP) ha emitido un comunicado instando al Gobierno a que dé marcha atrás, argumentando que lejos de contribuir a superar la crisis, la colocarían "al borde de la quiebra" y la harían "apetecible para intereses privados".
El sindicato exige que cualquier reestructuración se base en un "diagnóstico técnico" y una "hoja de ruta integral" que priorice la continuidad del abastecimiento de combustibles, la sostenibilidad financiera de la empresa y su gobernanza profesional.










