Miembros de la escala básica de la Policía Nacional de Honduras anunciaron que, a partir del lunes 29 de diciembre de 2025, se declararán en "brazos caídos" a nivel nacional, en protesta por una serie de incumplimientos laborales y pagos atrasados que, aseguran, han sido expuestos sin obtener respuesta de las autoridades competentes.
La medida de fuerza, que afectará a todo el país, surge luego de que los agentes de la escala básica denunciaran la falta de pago de sus salarios y otros beneficios laborales por parte del gobierno hondureño. Según los manifestantes, esta situación se ha prolongado por meses, generando un malestar generalizado entre los miembros de la Policía Nacional.
"Hemos agotado todas las vías de diálogo y negociación, pero lamentablemente no hemos obtenido respuesta satisfactoria de las autoridades. Nos vemos en la obligación de tomar esta medida drástica para visibilizar nuestra situación y exigir que se cumpla con nuestros derechos laborales", declaró un portavoz de los agentes en paro.
La protesta de los policías básicos se produce en un momento delicado para la seguridad pública en Honduras, país que enfrenta altos índices de criminalidad y violencia. Analistas temen que el paro nacional de la Policía pueda generar un vacío de poder que aprovechen los grupos delictivos para intensificar sus actividades.
Desde el Ministerio del Interior, las autoridades han manifestado su preocupación por la situación y han convocado a una reunión de emergencia con los representantes de los agentes en protesta. Sin embargo, hasta el momento, no se han anunciado soluciones concretas que logren desactivar el paro anunciado para el próximo lunes.
Expertos en seguridad ciudadana advierten que el conflicto entre el gobierno y la Policía Nacional podría tener graves consecuencias para la población hondureña, que ya enfrenta serios desafíos en materia de seguridad. Urgen a las partes a encontrar una solución negociada que evite el colapso de los servicios de seguridad en todo el país.
