El ex-director general de la Policía Rodoviária Federal (PRF) de Brasil, Silvinei Vasques, fue trasladado a la sede de la Policía Federal (PF) en Brasilia este sábado, 27 de mayo. Vasques había sido detenido la noche del viernes en el Paraguay, en medio de un intento de fuga, después de romper su tobillera electrónica en Santa Catarina.
Vasques fue condenado el pasado 16 de mayo por el Supremo Tribunal Federal (STF) a 24 años y seis meses de prisión. Entre otros cargos, se le acusa de haber comandado operativos ilegales de la PRF durante las elecciones de 2022 con el objetivo de obstaculizar el flujo de votantes en el Nordeste, región que tendía a apoyar al presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Desde agosto de 2024, cuando fue liberado de la prisión preventiva, Vasques estaba bajo monitoreo electrónico. Sin embargo, este mes fue nuevamente condenado por el STF a casi 25 años de cárcel. Aparentemente, intentaba llegar a El Salvador, pasando por Panamá, cuando fue interceptado por las autoridades paraguayas por usar documentos falsos.
Tras la fuga y captura de Vasques, el ministro del STF, Alexandre de Moraes, ordenó la prisión domiciliaria de otros 10 condenados por su participación en la trama golpista. Además de la prisión, se les impusieron medidas cautelares como la prohibición de usar redes sociales, contactar a otros investigados, entregar pasaportes, suspender sus permisos de armas y prohibirles recibir visitas.
El caso de Silvinei Vasques se suma a otros intentos de fuga protagonizados por implicados en la trama golpista, como los del expresidente Jair Bolsonaro y el exjefe de Inteligencia de la Presidencia, Alexandre Ramagem. Estas acciones reflejan los esfuerzos de los acusados por evitar cumplir sus condenas por los delitos cometidos en el contexto del ataque a la democracia brasileña.
