El rostro del médico lo definía absolutamente todo. La paciente Damelis Santos tenía un cáncer de útero categorizado como tipo cuatro, es decir, la tortuosa última etapa de un cuadro francamente irreversible. Prácticamente estaba desahuciada.
Fue entonces cuando Damelis le pidió al médico que hiciera "un milagro" para salvarle la vida. Y contra todo pronóstico, el galeno logró remitir por completo el avanzado cáncer que la aquejaba.
Este sorprendente caso ocurrió en Venezuela, donde la crisis económica y sanitaria ha dejado a muchos pacientes sin acceso a tratamientos efectivos para enfermedades graves. Sin embargo, la determinación y pericia del médico lograron revertir el fatal desenlace que se cernía sobre Damelis.
"Cuando vi su rostro tan deteriorado por la enfermedad, pensé que no había nada que pudiera hacer. Pero ella me suplicó que la salvara, que hiciera un milagro. Y eso fue precisamente lo que ocurrió", relató el profesional de la salud, cuya identidad no fue revelada para proteger la privacidad de la paciente.
Según los registros médicos, el cáncer de Damelis había alcanzado un estado tan avanzado que los tratamientos convencionales ya no tenían efecto. Sin embargo, el médico decidió aplicar un enfoque experimental que logró remitir por completo el tumor.
"Fue algo realmente extraordinario. Nunca había visto algo así en mi carrera. Es como si una fuerza divina hubiera intervenido", expresó el galeno, visiblemente emocionado por haber logrado salvar la vida de su paciente.
El caso de Damelis se ha convertido en un símbolo de esperanza en medio de la grave crisis que atraviesa el sistema de salud venezolano. Muchos pacientes con enfermedades terminales ven en este "milagro" médico la posibilidad de recobrar la vida, incluso cuando todo parece perdido.
"Dios obró a través de este médico para darme una segunda oportunidad. Estoy infinitamente agradecida y espero que mi historia inspire a otros a no perder la fe", concluyó Damelis, quien ahora se recupera satisfactoriamente en su hogar.
