Tras un acuerdo con el Gobierno nacional, el sector del transporte pesado de Santa Cruz suspendió sus medidas de presión anunciadas para este lunes. Sin embargo, el transporte urbano mantiene el paro, lo que ha perjudicado a la población que se ve obligada a buscar alternativas de movilidad.
El ministro de Obras Públicas, Mauricio Zamora, se reunió con representantes de la Cámara de Transporte del Oriente y la Federación Departamental de Transporte de Santa Cruz, y sellaron un acuerdo para la implementación de las medidas establecidas en el Decreto Supremo 5503.
El acuerdo contempla la conformación de comisiones de trabajo, el diferimiento de créditos y el saneamiento tributario para el sector transporte, la reducción a cero del gravamen arancelario para la importación de llantas, repuestos e insumos, y la coordinación para asegurar el abastecimiento de diésel y mejorar los mecanismos de control y operatividad.
Por su parte, el alcalde de Santa Cruz, Jhonny Fernández, conminó al sector urbano a levantar el paro y advirtió con revertir los permisos de operación si no vuelven a prestar el servicio. Fernández señaló que nada justifica el perjuicio a la población y que hará respetar la normativa, que establece la reversión de la autorización en caso de abandono de la ruta.
Los transportistas urbanos exigen una tarifa de Bs 4, mientras que la Alcaldía propone Bs 3, que estaría por encima de la rentabilidad de un micro a diésel. Pese a las reuniones entre las partes, no se llegó a un acuerdo.
El ministro de Desarrollo Productivo y Economía Plural, Óscar Mario Justiniano, lamentó la "intransigencia" de los transportistas urbanos y destacó los acuerdos logrados con otros sectores, como el transporte pesado, mineros, productores y juntas vecinales.











