El gobierno de Estados Unidos ha lanzado una campaña dirigida a personas que permanecen en el país sin estatus legal, ofreciendo un apoyo económico como incentivo para que regresen de manera voluntaria a sus países de origen durante la temporada decembrina.
La estrategia se basa en la aplicación móvil CBP Home, una herramienta oficial que permite a los migrantes gestionar su salida ordenada del país. Al completar el proceso, los participantes pueden acceder a un apoyo único de hasta mil dólares como "bono de salida".
El mensaje de la campaña enfatiza que permanecer en Estados Unidos sin documentos constituye un delito federal, por lo que el programa se presenta como una alternativa para evitar consecuencias legales más severas en el futuro.
La campaña se lanzó en Chihuahua, México, y busca incentivar el retorno voluntario de migrantes indocumentados durante las fiestas de fin de año. Según las autoridades estadounidenses, esta iniciativa forma parte de los esfuerzos por abordar de manera integral la crisis migratoria en la frontera sur.
"Queremos dar a los migrantes una oportunidad de regresar a sus países de manera ordenada y con un apoyo económico que les permita reintegrarse a sus comunidades", explicó un portavoz de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos.
La aplicación CBP Home facilita todo el proceso, desde la solicitud del bono hasta la coordinación del viaje de retorno. Los migrantes deben proporcionar información personal, como su identidad, lugar de origen y datos de contacto, para poder acceder al programa.
Organizaciones de derechos humanos han expresado preocupación por posibles abusos y falta de garantías en la implementación de esta iniciativa. Temen que algunos migrantes puedan sentirse presionados a aceptar el bono y regresar a sus países, incluso si no es su deseo.
"Es importante que el programa se implemente con total transparencia y respeto a los derechos de los migrantes. No deben ser obligados a aceptar el bono ni a renunciar a sus posibilidades de regularizar su situación migratoria", señaló un vocero de una organización de defensa de los derechos de los migrantes.
Hasta el momento, las autoridades estadounidenses no han revelado cifras sobre la cantidad de migrantes que se han acogido a esta iniciativa. Sin embargo, esperan que la campaña tenga una amplia aceptación entre la población indocumentada que busca evitar mayores complicaciones legales.










