Los aficionados mexicanos que siguen a la selección nacional en los mundiales de futbol han denunciado que los precios de los boletos para el próximo Mundial 2026, a celebrarse en Estados Unidos, México y Canadá, son "impagables" y amenazan con alejar a los verdaderos seguidores del evento.
Paco de Rubén, líder del grupo de animación Cielito Lindo, relató que para ir a Qatar 2022 pagó $6,500 dólares por todo el viaje, incluyendo una escala en Barcelona, mientras que para Rusia 2018 desembolsó $4,500 por un periplo de 35 días. Sin embargo, ahora, ir a un solo partido del Mundial 2026 cuesta casi lo mismo que todo el viaje a Qatar.
"Sabíamos que los precios serían caros, no somos ingenuos, aunque el aumento es increíble. Ahora ir sólo a un partido cuesta casi lo mismo que todo el viaje a Qatar", señaló De Rubén, quien tiene tres empleos en Los Ángeles para poder costear su sueño mundialista.
Livette Ruvalcaba, también integrante de Cielito Lindo, coincidió en que el Mundial 2026 será "impagable" para muchos aficionados. "Es un mundial impagable. Queremos organizar muchas cosas, pero no sabemos cuánta gente irá. A estas alturas en otros Mundiales ya teníamos boletos, hospedaje y transporte, ya estábamos preparados", lamentó.
Los testimonios de los seguidores mexicanos se suman a las quejas de aficionados de otros países, quienes se muestran inconformes por los altos precios impuestos por la FIFA para el próximo Mundial. Aunque el organismo indicó que los costos irían desde $60 dólares hasta $6,730 para la final, las cifras han cambiado por tarifas dinámicas.
Estos elevados precios amenazan con romper la idea del futbol como un deporte incluyente y cercano a los estratos sociales populares. En Mundiales anteriores, como el de 1970 y 1986 en México, los boletos eran mucho más accesibles para los aficionados.
"En el caso de México, de nada les servirá una Copa con estadios vacíos o gente abucheando. Si vas a estar en casa, es más bonito cuando la afición que va esté alentando", concluyó De Rubén.
