Uruguay XXI, la agencia de promoción de inversiones y exportaciones del país, adelantó cuáles serán los mercados con mayor proyección durante el próximo año y en qué países concentrarán sus esfuerzos de promoción y atracción de inversiones.
Según Larissa Perdomo, gerente de Marca País de Uruguay XXI, los mercados de Brasil y Paraguay vienen despertando un creciente interés entre las empresas uruguayas, especialmente para las pymes. El mercado brasileño se presenta como uno de los más accesibles en términos de escala, cercanía y oportunidades, a pesar del carácter proteccionista de su economía.
En ese sentido, se han abierto nichos específicos de alto valor agregado, como productos gourmet, vinos y servicios especializados, con casos de fabricantes de muebles en Brasil que han adquirido diseños desarrollados en Uruguay.
Para 2026, Brasil será uno de los mercados prioritarios para Uruguay, apalancado en el buen vínculo bilateral y en la relación del embajador Rodolfo Nin Novoa con el presidente Lula da Silva. En esta línea, este año ya se avanzó en un encuentro que reunió a más de 350 empresarios, en el que se presentaron casos concretos de inversión en Uruguay, como Cubo Itaú y Minerva Foods.
Además, la estrategia de Marca País apunta a aplicar acciones integrales, combinando la promoción de turismo, cultura, inversiones y exportaciones, y posicionando a Uruguay como un destino cercano, accesible y confiable para el mercado brasileño.
Paralelamente, desde Uruguay XXI también identifican la importancia de empezar a trabajar con mercados de la Unión Europea y el Acuerdo Transpacífico ante eventuales acuerdos comerciales. Si bien reconocen que los beneficios de estos acuerdos no se verán el próximo año, consideran clave acompañar a las empresas en el proceso de cumplir con los estándares exigidos.
Uno de los principales desafíos que enfrentan las empresas uruguayas para posicionarse en el mundo sigue siendo el costo de los fletes y la logística, especialmente para acceder a destinos más lejanos. En los mercados regionales, este obstáculo pierde relevancia, mientras que en plazas más distantes continúa siendo un factor que puede condicionar la competitividad.
Durante 2025, 80 nuevas empresas obtuvieron su certificación LSQA, ampliando la comunidad de organizaciones que hoy proyectan el sello uruguayo en el exterior. Este universo se caracteriza por una distribución equilibrada entre Montevideo y el interior del país, una presencia mayoritaria de mujeres en puestos de liderazgo y una amplia diversidad productiva.
