Las elecciones de Extremadura tendrán lugar el domingo, 21 de diciembre, una fecha complicada para la población dada la cercanía con los días importantes de la Navidad. Aunque María Guardiola, presidenta de la Junta de Extremadura, eligió esta fecha hace unos meses, puede que ahora a muchos ciudadanos les haya tocado ser designados como presidente, vocal o suplente de una mesa electoral, cuando ya tenían reservado este día para un viaje de vacaciones.
Ser miembro de una mesa electoral es una obligación legal, por lo que, en principio, no se puede faltar sin una justificación documentada. Sin embargo, las vacaciones por sí solas no son consideradas un motivo suficiente. Aun así, se puede presentar una alegación explicando los motivos por los que no se puede asistir.
Lo que hay que hacer es enviar una alegación documentada en los siete días siguientes a la notificación de la designación. La Junta Electoral será la encargada de decidir si los motivos aportados son justificados o no. En el pasado, se han dado casos en los que se han aceptado las vacaciones como causa justificada, ya sea por tratarse de un evento familiar de especial relevancia o por el perjuicio económico que supondría cancelar el viaje. No obstante, es imprescindible presentar la documentación necesaria para respaldar los argumentos.
Si la Junta Electoral no considera suficientes los motivos aportados, la persona designada deberá personarse el 21 de diciembre en el colegio electoral, de lo contrario, podría enfrentarse a posibles consecuencias legales.
Esta situación pone de manifiesto la dificultad que puede suponer para muchos ciudadanos compaginar sus planes personales y familiares con sus obligaciones cívicas, especialmente cuando las elecciones se convocan en fechas tan cercanas a las festividades navideñas. Sin duda, será un reto para los extremeños conciliar ambos aspectos en esta convocatoria electoral.
