El Congreso de Estados Unidos rechazó este miércoles dos resoluciones que buscaban impedir que el presidente Donald Trump pueda lanzar una ofensiva unilateral contra Venezuela, sin contar con la aprobación del Legislativo. Los votos republicanos, que cuentan con una estrecha mayoría en la Cámara de Representantes, junto al apoyo de algunos demócratas, fueron suficientes para que estas iniciativas no prosperaran.
Las resoluciones fueron lideradas por los demócratas Gregory Meeks, del Comité de Asuntos Exteriores, y Jim McGovern, del Comité de Reglamento. McGovern expresó su furia por lo que consideró una "cesión cobarde" de la responsabilidad constitucional del Congreso en materia de guerra a "un aspirante a dictador en la Casa Blanca".
La derrota de estas resoluciones se produce en un contexto de creciente tensión entre Washington y Caracas. Estados Unidos ha intensificado en los últimos meses la presión sobre el gobierno de Nicolás Maduro, desplegando una importante fuerza naval en el Caribe y ordenando el bloqueo de los buques petroleros venezolanos.
Trump argumenta que busca recuperar el "petróleo, las tierras y demás activos" que, según él, fueron "robados" a Estados Unidos. Sin embargo, los expertos señalan que la ofensiva estadounidense se enmarca en una estrategia de cambio de régimen en Venezuela.
La Casa Blanca ha justificado sus acciones aludiendo a la "crisis humanitaria" en el país sudamericano. No obstante, las resoluciones rechazadas buscaban limitar los poderes de Trump para emprender una intervención militar unilateral, sin el respaldo del Congreso.
La derrota de estas iniciativas legislativas allana el camino para que el presidente estadounidense siga profundizando su presión sobre Venezuela, en un momento en que el conflicto entre ambos países parece encaminarse hacia una peligrosa escalada.











