San Lorenzo atraviesa una profunda crisis institucional luego de la renuncia masiva de varios miembros de su comisión directiva. Tras la salida de la protesorera Carina Farías, el club quedó en estado de acefalía, es decir, sin una conducción clara.
La situación se agravó aún más con la negativa del presidente Marcelo Moretti a renunciar, pese a los pedidos de los socios y algunos de sus propios dirigentes. Moretti se presentó este martes en la fiscalía, donde varios miembros de la comisión directiva fueron a declarar por una denuncia de abandono del club.
Según el comunicado oficial del club, la acefalía implica el inicio de un proceso que debe concluir con un llamado a nuevas elecciones de autoridades. Para ello, se encomendó a la Presidencia de la Asamblea de Representantes la convocatoria a una reunión extraordinaria en las próximas 48 horas, a fin de designar una Comisión Transitoria que se encargue de poner en funcionamiento al club y convocar a la asamblea general que definirá un gobierno de transición y fijará la fecha de los comicios.
La crisis en San Lorenzo se profundizó en los últimos meses, con denuncias de abandono del club, pedidos de renuncia masivos y un clima de creciente tensión entre los dirigentes y los hinchas, que este martes se manifestaron frente a la sede del Nuevo Gasómetro exigiendo la salida de Moretti y el resto de la cúpula.
La situación institucional se traslada también al plano deportivo, con incertidumbre sobre la pretemporada del equipo y la posibilidad de contar con refuerzos, ya que ni siquiera hay un secretario que pueda firmar las operaciones. Todo indica que San Lorenzo deberá atravesar un período de transición hasta que se resuelva la crisis y se convoquen a nuevas elecciones.










