Caracas y Curazao. Un jet ejecutivo Falcon 900EX que cubría la ruta Aruba-Miami estuvo a punto de colisionar en el aire con un avión cisterna de reabastecimiento de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, en un incidente ocurrido el pasado sábado en espacio aéreo cercano a Venezuela.
Según informó la cadena CNN, los pilotos del jet privado alertaron de inmediato a los controladores de tráfico aéreo de Curazao, isla caribeña ubicada frente a la costa venezolana, tras percatarse de la proximidad extrema entre ambas aeronaves. "Estaban realmente cerca", habría expresado uno de los tripulantes al describir la maniobra evasiva que evitó el impacto.
Este incidente se produce apenas un día después de otro evento similar registrado en la misma zona del Caribe. El viernes anterior, un vuelo comercial de la aerolínea JetBlue, que viajaba desde Curazao hacia Nueva York, también estuvo a punto de colisionar con otro avión cisterna de la Fuerza Aérea estadounidense, el cual cruzó inesperadamente su trayectoria.
Ambos sucesos, ocurridos en un corto lapso de tiempo y en rutas aéreas cercanas, han encendido alertas sobre la coordinación del tráfico aéreo civil y militar en la región, especialmente en corredores internacionales frecuentados por vuelos comerciales y ejecutivos.
Hasta el momento, las autoridades aeronáuticas de Estados Unidos y del Caribe no han emitido un informe oficial detallado sobre las causas de estos eventos ni sobre posibles medidas correctivas, mientras crece el llamado a reforzar los protocolos de comunicación y control para evitar accidentes de mayor magnitud en el espacio aéreo del Caribe y zonas adyacentes a Venezuela.
Estos incidentes ponen de manifiesto la necesidad urgente de mejorar la coordinación y comunicación entre las autoridades civiles y militares en la región, con el fin de garantizar la seguridad de los vuelos comerciales y privados que surcan el espacio aéreo del Caribe. La falta de información oficial y la aparente falta de medidas correctivas inmediatas generan preocupación en la comunidad aeronáutica internacional.
Es imperativo que los organismos reguladores y las fuerzas aéreas de Estados Unidos y los países del Caribe trabajen de manera conjunta para identificar las causas de estos incidentes y establecer protocolos más robustos que eviten situaciones de riesgo similar en el futuro. La seguridad de los pasajeros y tripulaciones debe ser la prioridad máxima en un espacio aéreo cada vez más congestionado y complejo.
