El triunfo del candidato pinochetista José Antonio Kast en las elecciones presidenciales de Chile generó una fuerte reacción del presidente de Colombia, Gustavo Petro, quien afirmó que "vienen los vientos de la muerte" y advirtió que el pueblo chileno corre el riesgo de ser "masacrado en sentido literal y figurado".
A través de su cuenta en X, Petro denunció que sus mensajes sobre la derrota del progresismo en Chile fueron censurados. El mandatario colombiano consideró que Kast se presenta como un nuevo Pinochet, Hitler y otros dictadores, y aseveró: "Triste que Pinochet tuvo que imponerse a la fuerza, pero más triste ahora es que los pueblos elijan su Pinochet: elegidos o no, son hijos de Hitler y Hitler mata los pueblos".
Petro recalcó que "el fascismo avanza" y que jamás le dará la mano a "un nazi y a un hijo de nazi". Además, pidió que se cuide la tumba del poeta chileno Pablo Neruda, a quien visitó y cerca de cuya casa dijo haber sido feliz.
La victoria de Kast, quien se declara abiertamente pinochetista, representa la segunda más amplia desde el retorno de la democracia en Chile, solo superada por el triunfo de Michelle Bachelet en 2013. El próximo 11 de marzo, Kast asumirá la presidencia al recibir la banda de manos del actual mandatario, Gabriel Boric.
El resultado electoral en Chile ha generado preocupación en el progresismo latinoamericano, con la alcaldesa de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, alertando que interpela al movimiento en la región. Petro, por su parte, advirtió que "el fascismo avanza" y se negó a darle la mano a Kast, a quien calificó como "nazi y hijo de nazi".












