La elección presidencial de Chile ha sido una rotunda victoria para el candidato José Antonio Kast, del Partido Republicano. Con casi un 60% de los votos, Kast se impuso de manera contundente a su rival Jeannette Jara, del oficialista Partido Comunista.
El análisis de los resultados muestra que Kast logró un triunfo histórico, ganando en todas las regiones del país, incluyendo bastiones tradicionales de la izquierda como la Región Metropolitana y Valparaíso. Jara, por su parte, solo pudo imponerse en 35 de las 345 comunas a nivel nacional.
A pesar de que Jara logró aumentar levemente su apoyo respecto a la primera vuelta, sumando casi 2 millones de votos más, no fue suficiente para hacer frente a la maquinaria electoral desplegada por Kast y el Partido Republicano.
Uno de los factores clave en la derrota de Jara fue su incapacidad de captar el voto del candidato tercero en la primera vuelta, Franco Parisi. El esfuerzo por reforzar el despliegue en el norte del país, donde Parisi concentra gran parte de su base, no fue suficiente.
Según un análisis de Decide Chile, Jara logró llevarse el 34% de los votos de Parisi, pero también sorprendentemente consiguió el 25% de los sufragios de la candidata de Chile Vamos, Evelyn Matthei. Sin embargo, esto no alcanzó para contrarrestar el arrollador triunfo de Kast.
El análisis también señala que Jara concentró su apoyo en el electorado femenino, con mayorías entre mujeres menores de 35 y mayores de 54 años, así como entre hombres jóvenes. No obstante, el tramo decisivo de 35 a 54 años, donde Kast ganó en ambos géneros, resultó clave para el resultado final.
En definitiva, la victoria de Kast representa un giro importante en la política chilena, con el ascenso de una opción de derecha que logró imponerse de manera contundente en estos comicios presidenciales.
