La Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) proyecta que la industria ganadera boliviana alcanzará los $us 1.000 millones en exportaciones de carne de res para el año 2034. Esto se lograría a través de la venta al exterior de alrededor de 15 millones de cabezas de ganado.
Según las estimaciones de la CAO, para llegar a esa meta de exportaciones, Bolivia deberá aumentar su stock ganadero a 14,6 millones de cabezas para ese año. Actualmente, el país cuenta con aproximadamente 9 millones de reses.
"Como sector ganadero es que al año 2034 superemos las 14,6 millones de cabezas, casi el doble de lo que tenemos hoy", señaló la entidad gremial. Este crecimiento en la producción ganadera permitiría destinar una porción significativa a la exportación, logrando los $us 1.000 millones proyectados.
La CAO resaltó que este ambicioso plan de expansión de la industria cárnica boliviana requerirá importantes inversiones en mejoras tecnológicas, genéticas y de infraestructura a lo largo de la cadena de valor. Asimismo, será crucial contar con políticas públicas que fomenten el desarrollo del sector y faciliten el acceso a mercados internacionales.
"Tenemos que trabajar en mejorar la productividad, la eficiencia y la calidad de la carne para poder competir en los mercados internacionales", afirmó la Cámara Agropecuaria.
Bolivia ha venido incrementando gradualmente sus exportaciones de carne en los últimos años, alcanzando los $us 300 millones en 2022. Sin embargo, aún tiene un largo camino por recorrer para consolidarse como un importante jugador en el mercado global de carnes.
La meta de $us 1.000 millones en ventas externas para 2034 representa un desafío ambicioso pero alcanzable para el sector ganadero boliviano, siempre y cuando se implementen las estrategias y políticas adecuadas para impulsar su desarrollo y competitividad.
