La Fiscalía de Bolivia ha solicitado prisión preventiva por tres meses para el expresidente Luis Arce, quien fue detenido por presunto desvío de capitales del Fondo Indígena durante su tiempo como ministro de Economía.
El Ministerio Público alega riesgo de fuga y obstrucción a la investigación, además de indicios de delitos como enriquecimiento ilícito, adopción de resoluciones contrarias a la Constitución y las leyes, incumplimiento de deberes, uso indebido de influencias y conducta antieconómica.
Según el escrito de imputación, Arce "sugirió, promovió y autorizó la canalización irregular de fondos públicos hacia cuentas particulares" durante su gestión como ministro entre 2006 y 2017, así como en 2019 bajo el mandato de Evo Morales. Las autoridades señalan un perjuicio de unos 360 millones de bolivianos (44,5 millones de euros).
La Fiscalía también ha anunciado que llamará a declarar a 24 personas clave en la investigación, incluyendo a la exministra de Desarrollo Rural Nemesia Achacollo y la excónsul de Bolivia en Perú Felipa Huanca, entre otros ex altos cargos.
El expresidente Arce, actual dirigente del Movimiento al Socialismo (MAS), se ha acogido a su derecho a no declarar en su primera comparecencia ante las autoridades. La Fiscalía ha solicitado que sea enviado a la cárcel de Qalahuma, en La Paz, durante la investigación.
Este caso se enmarca en una crisis económica que, según el ministro de Gobierno, "contribuyó" el presunto desvío de fondos durante la gestión de Arce. La detención del exmandatario boliviano ha generado reacciones políticas y debates sobre la lucha contra la corrupción en el país.
