La primera Superluna del año y una lluvia de meteoritos coincidirán en los cielos de enero, pero la luz de una podría opacar a la otra. La lluvia de meteoritos Cuadrántidas alcanzará su pico entre la noche del viernes y la mañana del sábado, según la Sociedad Estadounidense de Meteoros. En cielos oscuros durante el pico, los observadores del cielo suelen ver alrededor de 25 meteoros por hora, pero esta vez probablemente verán menos de diez por hora debido a la luz de la Superluna del sábado.
"El mayor enemigo para disfrutar de una lluvia de meteoritos es la Luna llena", dijo Mike Shanahan, director del planetario en el Liberty Science Center en Nueva Jersey según AP News.
Las lluvias de meteoritos ocurren cuando rocas espaciales veloces chocan con la atmósfera de la Tierra, ardiendo y dejando colas de fuego a su paso, el final de una "estrella fugaz". Un puñado de meteoros es visible en cualquier noche, pero lluvias predecibles aparecen anualmente cuando la Tierra atraviesa densas corrientes de escombros cósmicos.
Las Superlunas ocurren cuando una luna llena está más cerca de la Tierra en su órbita. Eso hace que parezca hasta 14% más grande y 30% más brillante que la Luna más tenue del año, según la NASA. Esa diferencia puede ser difícil de notar a simple vista.
Las Superlunas, como todas las lunas llenas, son visibles en cielos despejados en cualquier lugar donde sea de noche. Las Cuadrántidas, por otro lado, se pueden ver principalmente desde el hemisferio norte. Ambos fenómenos pueden ser observados sin ningún equipo especial.
Para ver las Cuadrántidas, aventúrate al anochecer lejos de las luces de la ciudad y busca bolas de fuego antes de que la Luna arruine la fiesta, dice Jacque Benitez del Planetario Morrison en la Academia de Ciencias de California. Los observadores del cielo también pueden intentar mirar durante las primeras horas del amanecer el domingo.
Espera a que tus ojos se acostumbren a la oscuridad y no mires tu teléfono. Las rocas espaciales parecerán puntos blancos que se mueven rápidamente y aparecerán por todo el cielo.
Las lluvias de meteoritos reciben su nombre de la constelación de donde parecen provenir las bolas de fuego. Las Cuadrántidas, escombros espaciales del asteroide 2003 EH1, llevan el nombre de una constelación que ya no es reconocida.
La próxima gran lluvia de meteoritos, llamada Líridas, está programada para abril.
Las Superlunas ocurren varias veces al año y vienen en grupos, aprovechando el punto óptimo en la órbita elíptica de la Luna. El evento del sábado por la noche termina una racha de cuatro meses que comenzó en octubre. La otra Superluna del año será hasta finales de 2026.
Sobre la lluvia de meteoros Cuadrántidas, Brian Day del Centro de Investigación Ames de la NASA destacó la vistosidad de este evento astronómico.
"Una motivación extra para salir y ver las Cuadrántidas es la reputación de la lluvia de estrellas de producir espectaculares bolas de fuego", señaló según lanasa.net. "No solo estas bolas de fuego son eventos visuales memorables, sino también tienen un interés científico."
Respecto a la primera luna llena de enero (conocida como "Luna de Lobo"), si esta coincide con el perigeo (punto más cercano a la Tierra), se le denomina Superluna.
Los expertos del Planetario de la Universidad de Chile y de la NASA explican que, aunque visualmente la diferencia de tamaño es sutil para el ojo humano (un 14% más grande que una Microluna), el brillo es significativamente mayor.
"Una superluna puede parecer hasta un 30% más brillante que una luna llena en su punto más lejano, lo que ilumina el cielo nocturno de manera inusual y facilita la observación de detalles en los cráteres con binoculares básicos", indicó la NASA.











