El mercado inmobiliario del sur de Florida entra en una fase de ajustes selectivos. Mientras los precios de los condominios en Miami caen cerca de 10%, la demanda se concentra en dos extremos: vivienda asequible y lujo. Tasas, regulación y capital internacional reordenan el tablero sin señales de crisis sistémica.
La caída del precio medio de los condominios en Miami-Dade no implica un desplome general, sino una reconfiguración del mercado. El ajuste convive con un repunte fuerte en el segmento asequible y con un dinamismo sostenido en el lujo, impulsado por tasas más bajas, cambios regulatorios y flujos de capital internacional.
Según datos citados por Miami Herald, el precio medio de los condominios existentes en Miami-Dade cayó cerca de 10% interanual, reflejando un mercado que corrige excesos sin perder liquidez estructural. Las ventas totales de condominios bajaron un 3.78%, pero el rango de USD 200,000 a USD 400,000 creció un 21%, evidenciando que la demanda prioriza valor, ubicación y precios manejables.
"Los compradores buscan ubicación, valor y asequibilidad", afirma Eddie Blanco, presidente de la asociación local, señalando una señal de racionalidad más que de contracción del apetito inmobiliario.
El comportamiento del segmento asequible explica buena parte del contraste del mercado. Menos inventario, mayor claridad regulatoria y un alivio en las tasas de interés han reactivado a compradores primerizos y a quienes operan con márgenes más ajustados. Alfredo Pujol, presidente electo de la junta directiva de la Asociación de Agentes Inmobiliarios de Miami, atribuye el repunte a la baja de tasas impulsada por la Reserva Federal, que beneficia principalmente a viviendas de menor valor y primeras compras.
Por otro lado, el segmento de lujo sigue una lógica distinta. Allí, la caída de precios en condominios existentes no refleja el pulso real del mercado, dominado por nuevas construcciones, compras al contado y una fuerte presencia de capital extranjero. Las ventas de propiedades desde USD 1M crecieron 13.2% en Miami-Dade, y las superiores a USD 2.5M aumentaron 27.3%, impulsadas por compradores nacionales e internacionales de alto patrimonio.
El panorama regional confirma que no se trata de un fenómeno aislado. Miami-Dade y Broward muestran ajustes de precios en condominios, crecimiento en vivienda unifamiliar y una demanda que se redistribuye sin romper el equilibrio general del mercado. A dos años vista, el sector prevé estabilidad gradual: ajustes moderados, recuperación selectiva y un mercado que premia información, liquidez y disciplina financiera.












