La Policía ecuatoriana informó este martes sobre un importante decomiso de drogas en la provincia andina de Imbabura. Más de media tonelada de clorhidrato de cocaína fue incautada en un vehículo que se dirigía a la ciudad portuaria de Esmeraldas, uno de los principales puntos de salida de la droga hacia el exterior.
El operativo se llevó a cabo en la parroquia de San Antonio de Ibarra, en Imbabura. Las autoridades recibieron información de inteligencia que les permitió interceptar el vehículo sospechoso y realizar el hallazgo de la droga oculta en su interior.
Según el reporte policial, la cocaína decomisada tiene un valor estimado en el mercado internacional de alrededor de 15 millones de dólares. Este es uno de los mayores decomisos de droga realizados en Ecuador en los últimos meses, y refleja los esfuerzos de las fuerzas de seguridad por combatir el narcotráfico que utiliza al país como ruta de tránsito hacia Estados Unidos y Europa.
"Este golpe al crimen organizado demuestra el compromiso de la Policía Nacional y de todo el Estado ecuatoriano en la lucha contra el narcotráfico. Vamos a seguir trabajando incansablemente para desmantelar estas redes criminales y proteger a nuestros ciudadanos", declaró el ministro del Interior, Patricio Carrillo.
Las investigaciones continúan para determinar el origen de la droga, así como la identidad de los responsables de su transporte y distribución. Autoridades sospechan que esta carga estaba destinada a abastecer a organizaciones delictivas que operan en la zona fronteriza con Colombia, uno de los principales productores mundiales de cocaína.
Ecuador se ha convertido en un importante corredor del narcotráfico en la región, debido a su ubicación estratégica y a la presencia de grupos armados ilegales en zonas limítrofes. El gobierno ha intensificado los operativos antidrogas en los últimos años, pero el fenómeno sigue representando un desafío importante para la seguridad nacional.












