La Policía Forestal y Preservación del Medio Ambiente (Pofoma) atendió un caso de supuesto trato cruel a un can que había sido encerrado en un vehículo por más de ocho horas. Sin embargo, el dueño de la mascota aseguró que lo tuvo que dejar en el motorizado con agua y alimento, porque al edificio donde ingresó, no permiten mascotas.
Vladimir Padilla, jefe de Investigaciones de Pofoma, relató que la denuncia se realizó por tratos crueles y se elevó el caso a la Fiscalía. "Este ya determinará la apertura del mismo o en su caso ya el proceso de investigación para que se pueda realizar la investigación más a fondo", explicó.
Padilla adelantó que, si bien el can no habría tenido ningún trato cruel en cuanto a nutrición, ya que se encontraba con alimento y agua dentro del vehículo, el enfoque está en el "trato cruel en el entendido de que estaba encerrado en un ambiente donde no es óptimo pues para un animal".
La Policía Forestal indicó que se procederá a identificar y dar con el paradero del dueño del vehículo, quien habría dejado al perro encerrado por varias horas. Aunque el hombre aseguró que no tenía otra opción debido a que no le permitían ingresar con la mascota al edificio, las autoridades analizarán si hubo o no negligencia en el cuidado del animal.
El caso fue derivado a la Fiscalía, que determinará si corresponde la apertura de una investigación formal por presunto trato cruel a la mascota. La Policía Forestal reiteró que el bienestar de los animales es una prioridad y que no se tolerarán este tipo de situaciones, a fin de garantizar el respeto y la protección de los seres vivos.
