Un juez federal de Estados Unidos determinó que la administración del expresidente Donald Trump violó los derechos al debido proceso al deportar a decenas de venezolanos a una prisión de máxima seguridad en El Salvador sin audiencia ni oportunidad de defensa legal.
El fallo judicial representa una importante victoria para los venezolanos que han sido víctimas de deportaciones sumarias por parte de las autoridades estadounidenses. El juez ordenó que se les permita a estos inmigrantes impugnar formalmente sus órdenes de deportación.
La demanda fue presentada por un grupo de venezolanos que fueron detenidos y deportados entre 2016 y 2019, durante la administración de Trump. Según el expediente judicial, estos inmigrantes fueron sacados de sus hogares en Estados Unidos, esposados y trasladados a una prisión de máxima seguridad en El Salvador sin que se les brindara la oportunidad de defenderse legalmente.
"Este fallo es un recordatorio importante de que incluso en tiempos de crisis migratoria, el gobierno debe respetar los derechos fundamentales de los inmigrantes", afirmó Tess Hellgren, abogada del Southern Poverty Law Center, una de las organizaciones que presentó la demanda.
La decisión del juez federal obliga al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) a notificar a los venezolanos deportados sobre su derecho a impugnar sus órdenes de expulsión y a brindarles asistencia legal para hacerlo. Además, el DHS deberá informar al tribunal sobre los esfuerzos realizados para localizar y notificar a estos inmigrantes.
"Este es un fallo importante que reconoce que el gobierno no puede simplemente deportar a las personas sin darles una oportunidad justa de defenderse", señaló Hellgren. "Esperamos que esto ayude a restablecer un poco de justicia y debido proceso para los venezolanos que han sido víctimas de estas prácticas inhumanas".
La decisión judicial se produce en un momento en que la crisis migratoria en la frontera sur de Estados Unidos sigue siendo un desafío importante para la actual administración del presidente Joe Biden. Si bien el gobierno ha adoptado algunas medidas para revertir las políticas más duras de Trump, aún enfrenta críticas por el trato dado a los inmigrantes, especialmente a los provenientes de países como Venezuela, Haití y Centroamérica.
