La familia Cardona Escobar, cuyo miembro Rony Josué Cardona fue capturado por el asesinato de Blanca Gisell Medina, de 20 años, en Honduras, emitió una carta pública expresando su consternación, indignación y pesar por el crimen.
En el documento, los familiares del imputado condenaron categóricamente la acción y dejaron en claro que no justificarán ni encubrirán el crimen. Aseguraron que, desde que tuvieron conocimiento del hecho, su posición ha sido firme: no interceder ni defender al acusado.
"Como familiares del principal causante de su muerte, repudiamos y condenamos tal hecho y pedimos que como culpable pague por lo que hizo", expresaron en la carta. Además, recordaron que Rony Cardona había estado privado de libertad anteriormente, y que en esa ocasión fueron dos de sus propios hermanos quienes lo capturaron y entregaron a la Policía.
Los hechos ocurrieron el pasado 19 de diciembre en San Francisco de la Paz, Olancho, cuando Blanca Gisell Medina se dirigía a su lugar de trabajo. Cámaras de seguridad captaron el momento en que fue interceptada por dos hombres en lo que las autoridades consideran un ataque rápido y posiblemente planificado. La joven murió antes de recibir atención médica.
En su comunicado, la familia Cardona Escobar agradeció a los pobladores de la comunidad de La Avispa por colaborar en la captura del imputado, así como a las autoridades que atendieron las llamadas realizadas al 911 para lograr su detención.
Finalmente, la familia expresó su solidaridad con los parientes de la víctima, mientras las investigaciones continúan para esclarecer plenamente el caso y determinar responsabilidades.
