El panorama del mercado antiguo Abasto en Bolivia luce con poca afluencia de compradores esta mañana de viernes, feriado por Navidad. Sin embargo, los comerciantes ya alistan sus ofertas con miras a la cena de Año Nuevo, donde se espera un aumento en la demanda de ciertos productos.
Según lo relevado, el pollo, que llegó a costar hasta 22 bolivianos en días pasados, ahora se vende a 19 bolivianos. Por su parte, la carne de res de primera calidad se ubica entre 68 y 70 bolivianos el kilo, mientras que la de segunda está entre 58 y 60 bolivianos.
En cuanto a la carne de cerdo, tan apetecida por estas fiestas, los precios varían. Asimismo, otros alimentos muy requeridos para la preparación de la mesa de Año Nuevo, como el queso y el huevo, también han experimentado subas.
El queso, que solía venderse a 28 bolivianos, ahora se ofrece a 34 bolivianos, debido a la poca oferta y a que los productores menonitas no han llevado su producción al mercado. Por otro lado, el precio del huevo va desde los 30 bolivianos hasta los 24 bolivianos por el más económico.
Estos aumentos en los precios de los alimentos se dan en un contexto en el que el Gobierno atribuye los altos costos de la carne de res a la especulación y el contrabando. Según las autoridades, son ocho los actores que configuran el precio final de este producto en el país.
A pesar de la baja afluencia de compradores en el Abasto en esta jornada, los comerciantes esperan un repunte de la demanda en los próximos días, a medida que se acerque la celebración de Año Nuevo y las familias bolivianas se preparen para la tradicional cena.
