El ministro de Defensa de Bielorrusia, Víktor Jrenin, realizó declaraciones alarmantes sobre la situación geopolítica en la región. En una entrevista publicada este viernes por la televisión central belarusa, Jrenin definió la coyuntura actual como "tensa, complicada y que tiende a radicalizarse".
Según el ministro, los líderes de los países vecinos se muestran "reacios a entender que es necesario reducir el grado de tensión bélica". Jrenin afirmó que estos dirigentes "dicen por todas partes que se están preparando para una guerra" y que "no cree que sean palabras huecas ni que vayan de farol. Efectivamente lo están haciendo".
En este contexto, Jrenin aseguró que Bielorrusia se prepara "para todos los escenarios posibles", aunque siempre apuesta "por un entendimiento y por la paz". El ministro de Defensa bielorruso hizo estas declaraciones en medio de la creciente inestabilidad en la región, con el conflicto en Ucrania como telón de fondo.
Las tensiones geopolíticas entre Bielorrusia, Rusia y los países vecinos de la OTAN se han intensificado en los últimos años. Bielorrusia, aliada de Rusia, ha sido acusada de facilitar el ingreso de tropas rusas a Ucrania durante la invasión de 2022. Por su parte, el presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko, ha advertido en repetidas ocasiones sobre la posibilidad de un conflicto armado a gran escala en la región.
Las declaraciones de Jrenin reflejan la creciente preocupación de las autoridades bielorrusas por la escalada de la tensión militar en la zona. Bielorrusia parece estar preparándose para posibles escenarios de guerra, mientras que sus vecinos también intensifican sus preparativos bélicos, según el ministro de Defensa.
Esta situación genera gran incertidumbre y riesgo de una mayor inestabilidad en una región ya convulsionada por el conflicto en Ucrania. Expertos advierten que una eventual confrontación armada entre Bielorrusia, Rusia y los países de la OTAN podría tener consecuencias devastadoras a nivel regional e internacional.












