El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha ordenado el cese inmediato de una treintena de embajadores de carrera que accedieron a sus cargos durante la Administración de Joe Biden. Esta medida ha provocado fuertes críticas de la oposición demócrata y de miembros del servicio diplomático.
Según la información recogida, un grupo de senadores del Partido Demócrata envió una carta a Trump para pedirle que reconsidere su decisión, al considerar que dejar esos puestos vacantes "crea un peligroso vacío en el liderazgo estadounidense en el exterior".
Estados Unidos cuenta con dos tipos de embajadores: los designados políticos, que son estrechos colaboradores del presidente, y los diplomáticos de carrera, que son funcionarios del Servicio Exterior. Mientras que es habitual que un nuevo presidente reemplace de inmediato a los embajadores políticos, los diplomáticos de carrera suelen permanecer en sus puestos hasta concluir su mandato, ya que se entiende que cumplen las directrices de la Casa Blanca independientemente del partido en el gobierno.
Sin embargo, durante las últimas dos semanas, cerca de una treintena de embajadores de carrera recibieron llamadas del Departamento de Estado en las que se les comunicó, sin que se ofrecieran explicaciones, que debían abandonar sus puestos en enero y regresar a Washington.
Según la prensa local, la gran mayoría de los afectados se encuentra destinada en embajadas de África y Asia, y en menor medida en Europa o Latinoamérica, donde habría sido cesado el embajador en Guatemala, Tobin Bradley.
Esta medida se suma al recorte de personal impulsado por el secretario de Estado, Marco Rubio, quien despidió a más de 1.300 empleados de su departamento y autorizó el desmantelamiento de la histórica Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid).
En la carta enviada este miércoles, una decena de senadores demócratas, encabezados por Jeanne Shaheen, miembro de mayor rango del Comité de Exteriores del Senado, advirtieron de que quedarán vacantes más de la mitad de los puestos de embajadores en el mundo.
"Ya había 80 puestos de embajador vacantes antes de esta orden. Ahora, el número de embajadas estadounidenses sin jefe ascenderá a más de 100, aproximadamente la mitad de todos los puestos de embajador de Estados Unidos en el mundo. Este vacío en el liderazgo estadounidense representa una amenaza significativa para nuestra seguridad nacional", señalaron.
Por su parte, una portavoz de la Asociación Estadounidense del Servicio Exterior (AFSA), el sindicato de los diplomáticos, declaró a EFE que "los diplomáticos y embajadores de carrera no suelen ser destituidos de esta manera" y que "la falta de transparencia y de procedimiento contradice radicalmente las normas tradicionales".












