El Programa Nacional Warmi Ñan, del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, celebra la Navidad destacando las historias de personas que, desde diferentes roles, brindan acompañamiento, prevención y atención frente a la violencia.
En el marco de las festividades de fin de año, Warmi Ñan, que significa "Camino de Mujeres" en quechua, pone en primer plano las experiencias inspiradoras de aquellos que trabajan incansablemente para apoyar a las mujeres y poblaciones vulnerables.
"Estas historias nos recuerdan que, incluso en los momentos más difíciles, hay personas que dedican su esfuerzo a generar esperanza y amor", señaló la ministra a cargo del programa.
Entre las historias destacadas se encuentra la de Juana, una promotora comunitaria que brinda acompañamiento a mujeres víctimas de violencia en su localidad. "Cuando veo que una mujer logra salir adelante, eso me llena de satisfacción. Saber que puedo hacer una diferencia en sus vidas es lo que me motiva a seguir adelante", comparte Juana.
También se resalta el trabajo de Pedro, un agente policial que ha sido clave en la prevención de casos de violencia familiar en su distrito. "Muchas veces la gente no confía en la policía, pero yo me esfuerzo por generar un vínculo de confianza y escucha. Quiero que sepan que pueden contar conmigo", expresa.
Estas y otras historias forman parte de la campaña navideña de Warmi Ñan, que busca inspirar a más personas a sumarse a la lucha contra la violencia de género y el apoyo a las poblaciones más vulnerables.
"En estas fechas, es importante recordar que la solidaridad y el amor pueden transformar vidas. Estas historias son un ejemplo de ello y nos motivan a seguir trabajando por una sociedad más justa e inclusiva", concluyó la ministra.











