El gobernador de California, Gavin Newsom, ha declarado el estado de emergencia en varios condados del estado debido a las intensas lluvias y tormentas que han azotado la región. La medida permitirá a las autoridades acceder a recursos y asistencia adicionales para hacer frente a la situación.
Las precipitaciones intensas y los fuertes vientos han provocado inundaciones, deslizamientos de tierra, flujos de lodo y crecidas repentinas de arroyos y ríos, lo que ha puesto en riesgo a las comunidades, especialmente en aquellas áreas afectadas por incendios forestales a principios de este año.
"California está actuando con prontitud y decisión para hacer todo lo posible para anticiparnos a las peligrosas tormentas invernales", señaló Newsom en un comunicado. El estado ha desplegado recursos y activado las autoridades de emergencia, trabajando en estrecha colaboración con los socios locales para proteger a las comunidades y garantizar la seguridad de los californianos.
Los condados de Los Ángeles, Orange, Riverside, San Bernardino, San Diego y Shasta han sido incluidos en la proclama de emergencia. Esto permitirá a estas regiones acceder a recursos y asistencia adicionales para hacer frente a la situación.
Las fuertes lluvias e inundaciones repentinas han provocado al menos una muerte confirmada en el norte del estado, así como rescates de personas atrapadas en vehículos y viviendas. En la ciudad de Redding, situada en el extremo norte del Valle Central de California, se registró casi la cantidad de lluvia de un mes entre sábado y domingo, con aproximadamente 127 milímetros de precipitaciones.
Las autoridades de Los Ángeles emitieron unas 380 órdenes de evacuación para viviendas consideradas especialmente vulnerables, en un esfuerzo por proteger a la población ante los riesgos de las tormentas.
El gobernador Newsom ha destacado la importancia de que California actúe con rapidez y determinación para hacer frente a estas peligrosas condiciones meteorológicas. La declaración de emergencia permitirá a los funcionarios estatales y locales acceder a los recursos necesarios para responder de manera efectiva a los desafíos que plantean las intensas lluvias y tormentas.












